Octubre Vasco

Las elecciones realizadas en el Estado español no han sido buenas para el nacionalismo vasco en su conjunto. En este sentido, el PNV ha perdido unos 120000 votos, EA 32000 votos, Aralar 22000 votos, y Batasuna a partir de un análisis de los resultados de la abstención, unos 60000 sufragios.

La imposibilidad de formar un «Bloque Vasco» pudo haber sido la causa de la baja electoral del nacionalismo en su conjunto, como así también la falta de tensión en la militancia y dirigencia, para apoyar con la fuerza suficiente las propuestas de avance soberanista, enmarcadas en la «Hoja de Ruta» del gobierno tripartito.

Seguramente esta situación llamará a la reflexión a todos los partidos abertzales, ya que el único ganador de las elecciones pasadas ha sido el nacionalismo constitucional español. Resulta entonces necesario poner fin al desencanto y desánimo y trabajar codo a codo, y sin especulaciones partidarias, para continuar transitando la agenda vasca de 2008, la cual nos propone un debate en el Parlamento Vasco en el mes de junio para aprobar la «Consulta», que tendrá lugar el 25 de octubre.

Lo ocurrido el domingo 9M debe dejar una importante lección a tener en cuenta, para no volver a cometer los mismos errores políticos de cara al futuro. Mientras el nacionalismo constitucional español tiene en claro sus estrategias y tácticas políticas y electorales al abordar el tema vasco, el nacionalismo vasco se ha presentado a las últimas elecciones fraccionado y sin un discurso soberanista contundente y homogéneo, como si luego del 9M no quedara nada por resolver en el País Vasco.

Hay una sociedad que espera se solucione el conflicto político vasco, y existen partidos políticos abertzales, algunos miembros del gobierno tripartito, otros fuera del gobierno o ilegalizados, como así también plataformas de ciudadanos y ciudadanas que llevan adelante una invalorable tarea para aportar a la resolución del conflicto vasco, entre ellas Euskaria, el Foro de Debate Nacional y Erabaki. No queda lugar para el fracaso; se deberá actuar con un sentido responsable y patriótico; sólo se ha perdido una elección; si trabajamos todos por el derecho a decidir, podremos soñar con un octubre vasco.

* Universidad NLP/Argentina