Manifiesto per una Catalunya lliure i liberal

 

Promueven un manifiesto para reclamar los valores liberales en una Cataluña independiente
Cerca de 200 personalidades del mundo empresarial, político y periodístico ya han apoyado esta iniciativa del Colectivo Catalanes Libres

 

«Ser liberal es, en esencia, defender la libertad individual, por lo que entendemos que no se puede obligar a los ciudadanos a ser encajados de forma perpetua e inmutable en el territorio de un Estado Nación forjado en el siglo XVIII», este es un de los objetivos que persigue el manifiesto que se ha presentado este martes en el Ateneu Barcelonès. El Colectivo Catalanes Libres (CCL) ha puesto en marcha esta campaña para defender los valores del liberalismo en el marco de una Cataluña independiente.

«No es un manifiesto dogmático pero sí una declaración profundamente liberal» , explicó Eric Herrera, uno de los promotores, durante la rueda de prensa de presentación. En este sentido, Herrera ha asegurado que son un colectivo formado por «gente transversal» y «apartidista», a pesar de que algunos miembros forman parte de alguna formación política. Es el caso de uno de los impulsores, Toni Florido, también presente en la rueda de prensa, vinculado a la corriente ‘Llibergència’ del Partido Demócrata Catalán.

¿Qué valores defiende el manifiesto?

El derecho de autodeterminación es una de las reclamaciones que se expone en este texto. «El individuo debe poder decidir libremente en qué comunidad política o administración estatal participar», detalla el manifiesto. Asimismo, consideran que la independencia es «la única oportunidad de superar el modelo de un Estado históricamente autoritario e intervencionista como el español».

Por otra parte, el manifiesto también especifica el posicionamiento de este colectivo respecto a diferentes aspectos económicos, democráticos, de derechos civiles, de educación o de libertades individuales.

¿Quien ya lo ha apoyado?

Desde este martes por la mañana, todo el mundo que lo desee puede sumarse a este iniciativa firmando el manifiesto. Sin embargo, diferentes personalidades destacadas del mundo empresarial, cultural, político y periodístico ya lo han apoyado . Es el caso del presidente del Catalán Institute of America, Jordi Graupera ; el expresidente de Òmnium Cultural, Quim Torra ; el periodista Toni Aira ; o los dirigentes del Partido Demócrata Catalán, Silvia Requena y Marc Guerrero .

MANIFIESTO:

http://www.catalanslliures.cat

Por una Cataluña libre y liberal .

El liberalismo defiende los valores de la libertad, la autonomía personal, la diversidad, la pluralidad, la ayuda mutua, el progreso, la paz y la tolerancia. Durante los últimos años no han sido pocas las voces que, desde la ideológicamente transversal sociedad catalana, han expresado su visión sobre cómo debe ser ese nuevo Estado catalán.

Presentación

La declaración «Por una Cataluña libre y liberal» es un texto impulsado por el Colectivo Catalanes Libres (CCL), un grupo independiente de ciudadanos de diferentes ámbitos de la sociedad civil. Somos un colectivo absolutamente transversal, y sin ningún compromiso con partidos y entidades políticas; lo que nos une y nos ha animado a escribir esta declaración es un compromiso firme con la articulación de una sociedad libre y próspera en una Cataluña independiente. Somos liberales e independentistas, gente esperanzada con el proceso político que vive nuestro país, pero a la vez preocupada por el profundo desconocimiento que la sociedad catalana tiene los postulados liberales. Por este motivo, nos mostramos dispuestos a expresar nuestras propuestas de cara al futuro.

Históricamente, han sido valores liberales los que impulsaron el comercio por el Mediterráneo, el derecho civil catalán y la revolución industrial, fomentando así el progreso de nuestro país. Pensamos que el liberalismo en Cataluña está vivo en la sociedad, en el día a día de millones de ciudadanos, pero que necesita un empujón para aflorar y para convencer a una mayoría que a día de hoy se encuentra desconcertada en cuanto a los principios fundacionales del nuevo Estado catalán.

Es por este motivo por lo que hemos decidido aportar nuestro grano de arena en el debate de un proceso tan importante para nuestro país. A través de la publicación de esta declaración queremos hacer oír nuestra voz para que quede constancia de que hay ciudadanos que vislumbramos una Cataluña libre y liberal.

1. Autodeterminación

Los liberales apelamos al derecho de autodeterminación porque defendemos que el individuo debe poder decidir libremente en qué comunidad política o administración estatal participar. Ser liberal es, en esencia, defender la libertad individual, por lo que entendemos que no se puede obligar a los individuos a incluirse de forma perpetua e inmutable en el territorio de un Estado Nación forjado en el siglo XVIII.

A diferencia de lo que defienden las derechas e izquierdas jacobinas de Europa, como la francesa y la española, la descentralización y la fragmentación de los Estados Nación favorece la integración global, por un lado, e incrementa la competencia fiscal, por otro , lo que tiene un efecto disciplinario sobre el afán recaudatorio de burócratas y plutócratas.

Este respeto a la libertad individual pasa también por aceptar la identidad nacional compartida, y el derecho de ésta a emanciparse a través de un referéndum democrático.

2. Independencia

El colectivo Catalanes Libres somos partidarios de la independencia de Cataluña porque es la única oportunidad de superar el modelo de un Estado históricamente autoritario e intervencionista como el español. La sociedad catalana, como cualquier sociedad del mundo, tiene plena capacidad para autogobernarse, y es en el marco de un nuevo Estado como su capital humano y empresarial podrá potenciarse libre y plenamente.

Pensamos que el modelo productivo que promueve el Estado español, dominado por grandes empresas surgidas de los antiguos monopolios públicos (banca, telefonía y eléctricas), nunca ha buscado maximizar la eficiencia, la productividad y la generación de riqueza, y por tanto no responde a las necesidad del tejido económico catalán, formado mayoritariamente por Pymes que buscan crecer en un entorno global y competitivo. Asimismo, es un hecho que la distribución de las inversiones en el Estado español no ha conseguido mejorar las condiciones socioeconómicas de las regiones más empobrecidas, consolidando un esquema de dependencia entre éstas y las regiones más desarrolladas económicamente.

Pensamos que la independencia de Cataluña promoverá que las prioridades de los ciudadanos y las empresas catalanas se alineen de forma más eficiente con las prioridades de gasto e inversión del Estado. Es por este motivo que deseamos que esta se haga efectiva, preferentemente a través de un referéndum unilateral y una declaración de independencia, aunque no nos cerramos a ninguna vía democrática que tenga por objetivo su consecución.

3. Estado pequeño y abierto al mundo

Los estados pequeños y sin recursos naturales, como sería el caso de una Cataluña independiente, están obligados a vivir abiertos al mundo y al comercio para subsistir. El tejido industrial y empresarial catalán tiene un ADN internacional muy marcado que, como hemos argumentado en el anterior punto, llegará a su máximo potencial en una Cataluña independiente. Nuestros referentes son estados pequeños, interdependientes y abiertos que alcanzan grandes cotas de riqueza y bienestar para sus ciudadanos, como los Países Bajos, Dinamarca o Suiza.

Adicionalmente, pensamos que una Cataluña independiente será una influencia positiva para la construcción de una Europa que supere el modelo actual de estados nación decimonónicos y se convierta en un mercado abierto y plenamente competitivo.

La libre circulación de personas es otro de los pilares de la filosofía liberal. Estamos en contra de fronteras y aduanas que impidan o dificulten a los individuos la libre elección del destino donde vivir, trabajar y desarrollarse como personas.

4. Renovación institucional

Defendemos un marco jurídico e institucional que proteja la libertad individual, los derechos civiles y la igualdad ante la ley. La evidencia demuestra que la clave del progreso social es el diseño de instituciones inclusivas que, en el ámbito político, garanticen la participación, la representatividad, el pluralismo y los controles sobre la arbitrariedad de los políticos a través de pesos y contrapesos. En el ámbito económico, las instituciones deben asegurar el derecho de propiedad, el cumplimiento de los contratos y la libre competencia como fundamento para garantizar el crecimiento económico y la productividad de los agentes económicos.

5. Estado limitado y justicia social

No creemos en el igualitarismo impuesto; pensamos que una sociedad libre, donde la iniciativa privada pueda desarrollarse sin trabas y la riqueza generada por los individuos se quede en sus bolsillos, es la mejor garantía de bienestar y prosperidad.

No defendemos un Estado benefactor, sino subsidiario: pensamos que su tarea es garantizar asistencia de calidad a aquellos que circunstancialmente no pueden llevar una vida digna por ellos mismos, o a aquellos que libremente así lo decidan. Más gasto social no equivale a más justicia social. Como ejemplo: el gasto social de España es superior a la de Australia, Canadá, Japón, Suiza, Alemania o Noruega pero es claramente regresivo. Así pues, reducir la presión fiscal y el tamaño del Estado es compatible con mejorar la incidencia redistributiva, priorizando la protección social de los colectivos más vulnerables de la sociedad y garantizando la mejora de sus condiciones vitales a través de propuestas efectivas y finalistas. La subvención íntegra de un servicio independientemente de la renta del beneficiario perjudica a los más desfavorecidos.

Asimismo, pensamos que una fiscalidad expansiva es incompatible con el dinamismo económico y contraria a la libertad del individuo de disfrutar plenamente de su renta disponible. Pensamos que los impuestos se deben reducir y limitar con el único objetivo de sustentar un mínimo Estado subsidiario.

6. Libre competencia

El Estado debe garantizar la libre competencia y la liberalización de los servicios. Queremos que Cataluña esté libre también de los monopolios estatales: no queremos un gobierno intervencionista que financie arbitrariamente ciertos sectores privados o que rescate empresas con fondos públicos. Pensamos que el libre mercado y la no intervención estatal es el ecosistema natural para el desarrollo de Pymes y cooperativas, los motores del tejido industrial catalán. El deterioro de la asignación de recursos entre empresas, lo que entendemos por clientelismo, es el responsable de que la productividad haya caído un 0.7% anual entre 1995 y 2007, elemento claramente divergente con el resto de Europa. El modelo económico de la Cataluña independiente debe fundamentarse, pues, en los sectores productivos, entendiendo la empresa como el eje central sobre el que debe pivotar la generación de riqueza y empleo.

7.  Empleo

Apostamos por la no intervención del Estado en el mercado laboral y en la no subvención de sindicatos, patronales ni ningún tipo de asociación. Defendemos un modelo de mercado laboral flexible, donde sea fácil contratar y despedir, y donde la movilidad sea elevada. La iniciativa privada y la cooperación entre individuos deben constituir el principal instrumento para la generación de valor y la respuesta efectiva contra la pobreza y los problemas sociales.

8. Democracia radical

No creemos en la falsa democracia dominada por partidos políticos subvencionados con listas cerradas. Valoramos el modelo electoral anglosajón, basado en las listas abiertas, los méritos de los candidatos individuales y la financiación a los partidos sin límites pero transparente. Creemos también en la democracia directa y en los referendos para resolver conflictos comunitarios (modelo suizo).

9. Derechos civiles, libertades individuales y educación libre

El Estado debe mantenerse neutral respecto a las cuestiones que afectan a la vida privada del individuo, que debe ser soberano en cuanto a la moral y a los valores a través de los cuales quiere guiar su vida. El liberalismo es una cosmovisión integradora, completa y coherente: el Estado no debe meter mano ni en la bragueta ni en el bolsillo, no tiene derecho a expoliar al contribuyente con un esfuerzo fiscal asfixiante ni coaccionar la libertad sexual, religiosa, de pensamiento, de expresión o de asociación. En esta línea, defendemos el derecho a la eutanasia, la despenalización de las drogas y el derecho a la propiedad del propio cuerpo.

Creemos en una educación libre, donde se puedan incluir modelos como el ‘homeschooling’, y en la autonomía de cada centro para adaptar sus programas a su demanda. Valoramos la libre competencia, también en la educación, como motor de la excelencia. En esta línea, reclamamos la libre elección de centro y la introducción del cheque escolar para hacerla plenamente efectiva. Reivindicamos, por tanto, la herencia del modelo pedagógico autónomo y descentralizado de la Escuela Moderna de Francesc Ferrer i Guàrdia.

10. Libertad 360º

La libertad individual es un valor occidental en el que creemos firmemente y es la base de nuestra ideología; una libertad que entendemos como asociada a la responsabilidad y a la plena asunción de las consecuencias de los actos individuales, lejos del modelo de Estado paternalista. Queremos una sociedad de libertad plena, donde cada individuo sea dueño de su destino; una sociedad de individuos creativos, emprendedores y conscientes de sí mismos, que rehuya la demagogia de masas. Ésta, pensamos, es la base ideológica para alcanzar una sociedad pacífica de progreso y bienestar.

RACÓ CATALÀ / http://www.catalanslliures.cat/articles/