Las diez razones para votar sí el primero de octubre

Ofrecemos diez argumentos para defender el voto a favor de la independencia en el referéndum

La Generalitat de Cataluña anunciará hoy qué día se hará el referéndum de autodeterminación. Los ciudadanos del Principado serán convocados a votar, tras el verano, sobre la independencia de Cataluña. Les presentamos diez razones para votar que sí en este referéndum.

1. Porque la independencia es la solución más sensata a los problemas de encaje de Cataluña en el Estado español. La autonomía es un fracaso, como se ha hecho evidente, y el retorno al centralismo no es ni válido ni viable. El Estado español rompió el pacto de la transición con la sentencia contra el estatuto y ahora no hay ninguna posibilidad de volver atrás, no podemos volver a ser una autonomía de los años ochenta o noventa. La alternativa es o independencia o una autonomía raquítica, incluso con menos competencias y capacidades de las que el Principado tenía hace diez años.

2. Porque reformar España hoy es un objetivo mucho más difícil, casi imposible. Podemos estrellarnos durante años contra la pared tratando de reformar un Estado que no quiere ser reformado, pero es mucho más sencillo y útil crear una república nueva, con leyes dignas, con una justicia independiente, con balances sólidos contra los excesos del poder, con justicia social para todos. Los catalanes, al fin y al cabo, no podemos imponer a los españoles un modelo institucional y político diferente del que tienen hoy, no podemos imponer un modelo que han demostrado sobradamente que no quieren tener. La gran mayoría de los ciudadanos del Estado español no quieren un Estado federal ni encuentran que el funcionamiento de las instituciones actuales sea un gran problema.

3. Porque la independencia es una ocasión de crear un Estado nuevo, sin hipotecas respecto del pasado. La independencia permite hacer la ruptura con el franquismo que no se pudo hacer en los años ochenta. Y esta es la razón principal. La independencia es una hoja en blanco con la que podemos decidir cómo queremos ser independientes: decidiremos qué instituciones tendremos y con qué prioridades actuarán, decidiremos qué relación queremos entre los ciudadanos y el poder. Sin coerciones de nadie, sin límites impuestos y sin cargas del pasado.

4. Porque en el mundo en que vivimos, en la realidad, tener un Estado propio es una garantía y una gran ventaja desde todos los puntos de vista. Y no tenerlo es un inconveniente grave. La única manera de frenar y modular los excesos de la globalización es tener un Estado capaz de defender a los ciudadanos marcando e imponiendo reglas legales.

5. Para participar en el mundo global. Para poder tener voz y voto allí donde se decide qué somos y cómo vivimos. Muchas de estas decisiones hoy ya se toman fuera del marco estatal, donde no eres nada, donde no tienes voz ni tienes voto si no eres un Estado reconocido. Muy especialmente, es imprescindible que Cataluña tenga voz y voto dentro de las instituciones europeas.

6. Porque estamos en condiciones de crear una república que funcione mucho mejor que la monarquía española. Con una democracia más participativa, con más equidad y responsabilidad, con más pluralidad. En el mundo de hoy los países pequeños y cohesionados como el nuestro son los que mejor funcionan.

7. Porque la independencia nos impedirá para siempre recurrir a la queja que son otros que no nos dejan actuar. Asumir la responsabilidad concreta de las cosas es sano y enriquecedor para todas las sociedades. Se habrá acabado acusar a España de que no hace el corredor mediterráneo. Se habrá acabado culpar a Madrid de que los trenes de cercanías son un infierno. Se habrá acabado quejarse de los malos servicios.

8. Porque la independencia nos permitirá eliminar la discriminación de las lenguas catalana y occitana y convivir en un entorno responsable con las otras lenguas que se hablan en el país. Podremos vivir con plenitud en catalán, en un país voluntariamente multilingüe y que valore la diversidad.

9. Porque la independencia será un estímulo para el resto del país y también para el Estado español y para todos los pueblos del mundo. La independencia nos hará asumir con más naturalidad nuestra responsabilidad para con el resto de los Países Catalanes y mostrará a los pueblos del Estado español que es posible extinguir este régimen nacido de la transición que se ha convertido en una pesadilla para todos.

10. Porque con la independencia podremos servirnos más racionalmente de nuestros recursos e impedir que una parte de la sociedad sea acorralada, ahogada económica y socialmente. La independencia nos servirá para no poner barreras a la solidaridad y poder ejercerla con cualquier persona, viva en el Estado donde viva.