Mi deseo principal, en algunos escritos anteriores, igual que en éste, es señalar que lingüistas internacionales de primera fila, han dedicado gran interés al estudio de nuestra lengua, aunque puede que no todas sus teorías sean exactas. Bien difícil para los paleo lingüistas acertar con el verdadero origen de una lengua tan antigua. Por supuesto que nuestro Koldo Michelena supera a todos ellos pero es un orgullo que desde fuera se valore algo tan nuestro como es nuestra lengua milenaria.
El lingüista alemán Guillermo Humboldt (1767-1835), hermano del geógrafo y explorador Alexandre, se inicia en la Universidad de París en el estudio del euskera con textos de Oihenart, Leizarraga, etc. Humboldt viajó varias veces a Euskalerría para estudiar el euskera, en su primer viaje acompañado de su esposa y de sus dos hijos. Señalo algunas afirmaciones del culto lingüista alemán: «Hay que estudiar la lengua de los vascos, para llegar a las primeras fuentes de las lenguas europeas». «La lengua vasca es la más antigua de Europa». «Es una de las lenguas de más perfecta formación, sorprende por su rigor, la estructura de sus palabras, la brevedad y la osadía de la expresión».
Recorrió Vizcaya «aldea a aldea, para escuchar el euskera de viva voz». Entre otros muchos estudios, analiza los nombres en euskera de montañas, ríos, peñas y valles (la toponimia nos habla de la lengua que se ha usado en el lugar, a veces, en tiempos remotos). Escribió dos obras en alemán sobre el euskera en 1817 y 1821. Dio a conocer el euskera a todos los hombres de ciencia, filólogos y lingüistas de Europa. Sólo puedo señalar aquí algo de lo mucho que investigó Guillermo Humboldt sobre la lengua de los vascos.
¿Valoramos suficientemente nuestra lengua? He visto a muchos que hablan sistemáticamente en contra del euskera, sin conocer la lengua. Sí que la valora el Congreso de Europa al tratar en La Carta Europea de las Lenguas Minoritarias, aconseja a nuestras autoridades navarras que se impliquen en la conservación del euskera fomentando los medios de comunicación (radio y televisión) en nuestra lengua. ¿Seguirán desoyendo lo que, para vergüenza nuestra, nos recomiendan desde fuera?
