La memoria visual nabarra en peligro de extinción

Las representaciones visuales más antiguas de las que se tiene noticia en el actual territorio navarro se encuentran en la cueva de Alkerdi (en Urdax); constituyen un valioso testimonio de las sociedades del epipaleolítico. Estas pinturas representan  un bisonte, un caballo, un ciervo.  El descubrimiento en el año 1930 de los grabados parietales de la cueva de Alkerdi por Norbert Casteret inauguró una serie de investigaciones que permiten indagar aquel universo visual y simbólico de 15.000 años atrás.

Recientemente las condiciones extractivas de explotación de los recursos naturales que lleva adelante la empresa Mármoles del Baztán ha puesto en peligro la conservación de este valiosísimo patrimonio del pueblo navarro. Ante esta situación los vecinos se organizaron en la plataforma SOS Alkerdi, exigiendo al gobierno la paralización de las destructivas voladuras como condición sine qua non para garantizar la continuidad en el tiempo del patrimonio cultural.

Otro importante conjunto de representaciones visuales en peligro de extinción son las que se encuentran en el sitio arqueológico denominado Abrigo de la Peña del Cantero en Etxauri. Quienes investigaron este patrimonio visual (I. Barandiarán, E. Vallespí, I. Santesteban y otros) han concluido que su datación debe situarse entre el eneolítico y la edad de bronce. Conforman este conjunto de representaciones visuales una figura antropomorfa (quizá una mujer) y dos zoomorfas (posiblemente cápridos). Fueron realizadas en color rojo. Javier Nuin advierte que en la actualidad no se pueden contemplar estas representaciones de arte prehistórico, debido al grado de deterioro que han sufrido desde que se construyó un refugio para montañeros. La mala gestión y la falta de un plan de conservación, han permitido la práctica desaparición de estas representaciones. Sólo nos queda disfrutar de los dibujos (calcos) que de ellas realizó Isaac Santesteban en el año 1968.

¿Podemos atribuir sólo a la ignorancia y la desidia del gobierno esta destrucción del patrimonio? ¿Qué representan estas imágenes para merecer semejante destino?

En primer lugar debemos contextualizar a las sociedades que las produjeron. Aquellos artistas de la edad de bronce eran euskaldunes que vivían en libertad. La investigación, preservación y difusión de aquellas imágenes recuerdan y ponen en evidencia la antigüedad y legitimación histórica de la voluntad independentista navarra. Destruir esas representaciones visuales  es una manera de ocultar la memoria visual de un tiempo donde en Nabarra no se necesitaban ridículas “Leyes del vascuence” y, por supuesto criminales “Fuerzas de ocupación”.