La alcaldesa de Roma, Virginia Raggi, del Movimiento 5 Estrellas, no fue a la conmemoración de la masacre de las Fosas Ardeatinas para irse de vacaciones a esquiar. No había pasado nunca y en Italia hay una polémica de fondo. En las Fosas Ardeatinas fueron asesinados por los nazis en marzo del año 1944 un total de 335 civiles italianos como represalia por un atentado contra el ejército de ocupación. El aniversario es un día importante en la memoria cívica italiana. En Italia vienen a decir que si no fue por pura frivolidad, porque quería ir a esquiar, mal. Pero hay una hipótesis peor: que dejara de ir a conciencia. Entre el sector ideológico de la izquierda alternativa que la alcaldesa representa existe la tendencia a creer que el mundo lo han descubierto o lo han inventado ellos. Y que toda la memoria, toda la tradición anterior, es ideológicamente sospechosa y prescindible. No hay otra memoria válida que la que ellos construyen, a la medida de sus necesidades políticas. Como le decía un diputado del Partido Democrático, dejar una silla vacía en un evento como éste es decirle al mundo que tenías cosas más importantes que hacer. Que esta conmemoración es algo antiguo, ajena, que te puedes saltar, porque no es tuyo.
ARA
